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Entrevista
a Shadi Ghadirian Con 30 años, Shadi es considerada actualmente una de las artistas de Irán con más proyección e influencia. Sus fotografías de estudio sobre la mujer en la vida cotidiana y paradójica de las sociedades musulmanas es su faceta más conocida. Pero esta ex-alumna del recién establecido Departamento de Fotografía de la Universidad de Teherán, tiene también una vinculación social determinante en la sociedad iraní. Es una de las responsables de la página web womeniniran.com, activista cultural e inquieta con los nuevos formatos de comunicación. Shadi Ghadirian responde desde la cotidianidad de su trabajo. -¿Cómo ves la creciente actividad, gracias a Internet, de proyectos sobre la mujer en Irán? Actualmente hay muchas páginas como la nuestra publicadas desde el mismo Irán. Es bastante fácil el acceso, aunque lento. womeniniran está recibiendo en los últimos seis meses multitud de visitas. -¿Cómo afecta el control y la censura por parte del gobierno? Obviamente hay represión, y algunas páginas han sido cerradas. Pero es imposible de controlarlo todo en un medio tan esquivo. También depende del grado de crítica que contengan las páginas. Por ejemplo hay escritores arrestados, pero también hay páginas que escapan al control. -Leí hace tiempo que algunos de tus trabajos no pueden mostrarse en Irán. Es cierto, pero por ejemplo lo que hace cuatro años no podía mostrar por el riesgo que corría la galería, ahora ya ha sido expuesto. Tuve una exposición de este trabajo (donde se insinuaba el cuerpo de la mujer mediante encuadres borrosos) hace tan solo un mes. De todas maneras todavía no puedo mostrar fotografías de mujeres que muestren su cabello y que no se cubran con un pañuelo. -¿Tienes miedo de ser arrestada por tu trabajo? No, no creo. Siempre utilizo el pañuelo en mis modelos, también porque es una parte de nuestra realidad. Conozco mis límites y tampoco pretendo buscar la provocación y la confrontación explícita. Pretendo mostrar nuestra vida y el velo y el hyjab son parte de ella. -Pero al mismo tiempo siempre estás utilizando el estudio y la modelo. Tus fotos tienen mucho de ficción y no son meros documentos. Sí, creo que ya tenemos muchísimos documentalistas. La fotografía iraniana, a causa de la guerra y la revolución, se decantó casi exclusivamente por el fotoperiodismo. En los últimos años lo artístico va apareciendo en la fotografía. -¿Hay una relación muy estrecha con el cine? Indudablemente. También la repercusión del cine iraní en el resto del mundo nos ayuda a promocionar el resto del trabajo artístico. Con el cine la gente puede identificarse más con nuestra realidad. También es cierto que muchas personas en Irán no tienen la posibilidad de mostrar su trabajo fuera, ya que hay problemas con los visados. Pero la calidad del arte (escrito, visual, etc...) es muy alto en Irán. No sólo en el cine. -¿Has expuesto fuera de Europa y los Estados Unidos? Únicamente en Kuwait. En Europa he tenido más de 15 exposiciones, pero en los países árabes es más difícil. Tengo prevista una en Egipto y otra en Dubai para el próximo año. -Quizá muchas veces se piense sólo en la posibilidad de exponer en Europa o EE.UU... Sí, pero también es verdad que en estos países tienen más posibilidad de organizar eventos. Son razones económicas. También creo que los europeos no saben casi nada de nuestros países. Y es momento de mostrarlo. -En una entrevista leí que no querías quedarte a vivir en Londres cuando tuviste la oportunidad. ¿Te has planteado establecerte en otro país? No, no podría. Adoro mi país, y también hay mi madre, mi marido... -¿Cómo ves tu condición de mujer, artista e iraní en relación al mundo artístico? En Irán es más fácil, a veces, dedicarse a la fotografía siendo mujer. Tienes acceso a espacios privados que un hombre no dispone. En el campo del mercado internacional, donde quizá parezca que siempre se está buscando algo nuevo, no he tenido este sentimiento. -Parece que algunos comisarios europeos se dirigen a estos países en busca de algo nuevo para vender. No siempre es así. Por ejemplo con los comisarios que yo he trabajado nunca me he sentido así. Hay un gran interés por mi trabajo, y me han ayudado. A veces también he organizado exposiciones por mí misma, y siempre me he sentido libre en este aspecto. Creo que soy respetada como artista y no soy vista como algo exótico. -¿Cómo es el acceso, por ejemplo, a libros extranjeros? Hay algunas librerías grandes, donde hay importación. También hay una feria internacional muy importante cada año, donde nuestros pedidos son servidos y cobrados en dólares. También es verdad que en correos a veces censuran algunos de los envíos. -Estaba pensando sobre el vestido. Pero no sólo en el velo, sino como es usado el vestir. Es muy lindo cómo las mujeres usan el vestido en Irán. Creo que es bastante diferente a otros países. Hay variedad también dependiendo de cómo interpreten su cuerpo en relación a la comunidad. No hay muchas, pero las que son religiosas van todas de negro. En mi caso voy vestida con pantalones, y trajes-chaqueta. Llevo un pañuelo en la cabeza, pero es muy pequeño. Mi larga cabellera sale por todas partes. En el interior de las casas todo cambia. Puedes realmente vestir como quieras. Tenemos también muchas tiendas como Zara y Mango y lo que venden es exactamente lo mismo que pueden vender en otra parte. También hay diseñadores autóctonos, como por ejemplo toda la línea para azafatas. O las parlamentarias. -¿Por qué crees que Europa tiene tanta obsesión con un trozo de tela? Para mí el velo es como mi pelo. Crecí con él y no entiendo porqué los europeos tienen esta fijación despectiva. Mis problemas como mujer en Irán no son estos; hay cosas realmente importantes. -¿Crees que debemos todavía hoy creer en Occidente? ¿No es sólo un mito más? Exacto, hablamos de Occidente como hace siglos hablábamos de Oriente. Algo homogéneo y real, sin fisuras. Soy optimista en este sentido, creo que se van diluyendo estas fronteras. Poco a poco las culturas se van conociendo y mezclando. Hay mezclas muy interesantes. Por ejemplo las generaciones jóvenes en Irán son, en algún sentido, muy diferentes. Internet, satélite... Paradójicamente también es cierto que después del 11s parece que nos estemos volviendo a encerrar. Mi próximo proyecto tratará de cómo Internet aterrizó en mi cultura. En cierto sentido creo que la obsesión por conectarse nos perjudica. La idea de una ventana abierta al resto del mundo es cierta, pero en mi caso prefiero tumbarme tranquilamente y leer un buen libro. También prefiero ver las cosas con mis propios ojos, viajar, sentir. No puedo entender muchas cosas sólo a través de la pantalla. ¿Cómo te imaginas el futuro próximo de Irán? ¿Tienes miedo a una posible intervención militar de Estados Unidos? No creo que esto pase. Creo que si algo sucediera no sería para peor, pero tampoco soy nadie para analizarlo. ¿Es fácil ahora visitar Irán? ¡Sí! ¿Quieres venir? Por favor ven. Creo que es un país extraordinario, muy diferente a otros. Con muchas cosas increíbles para ver. ______________________ Webs relacionadas: http://www.womeniniran.com http://www.iwsf.org
http://www.badjens.com http://www.zan.org
http://www.iran-books.com
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